Desde otra perspectiva, en el ámbito de la contabilidad y las finanzas en las pymes, los errores más comunes en balances generales y estados de ganancias y pérdidas suelen estar relacionados con aspectos de registro, control y análisis.
Algunos errores comunes en el balance general:
Inexactitud en la clasificación de activos y pasivos. Esto es, por ejemplo, cuando se confunde activos corrientes con no corrientes (por ejemplo, incluir cuentas por cobrar a largo plazo como corrientes). O mezclar pasivos a corto y largo plazo.
Subestimación o sobreestimación de inventarios. Caso, por ejemplo, al no realizar ajustes adecuados para inventarios obsoletos o dañados o inflar los valores para mostrar una mayor solvencia.
Falta de conciliación bancaria. Suelen presentarse diferencias entre los registros contables y los saldos reales en las cuentas bancarias que no se corrigen.
No considerar la depreciación acumulada o usar métodos inconsistentes para calcularla.
Con respecto a los errores comunes en el estado de ganancias y pérdidas:
Reconocimiento inadecuado de ingresos y gastos: Registrar ingresos antes de que se realicen (principio de devengo). No incluir todos los gastos relacionados con el periodo, como los costos indirectos.
Errores en la clasificación de gastos: Mezclar costos operativos con no operativos (por ejemplo, incluir intereses como parte de costos de operación).
Falta de detalle en los costos de ventas: No reflejar correctamente el costo real de los productos vendidos, lo que afecta el margen bruto.
Subregistro de gastos: No registrar todos los gastos relacionados con pequeñas transacciones (pequeña caja, gastos personales del dueño incluidos como operativos).
Algunas recomendaciones para evitar o corregir estos errores:
Implementar sistemas contables automatizados que minimicen errores.
Realizar auditorías internas periódicas.
Capacitar al personal contable en normativas contables vigentes.
Contar con el asesoramiento de un contador público certificado.